25 mar 2012

Yo nací para ser feliz, no normal.

No somos novios, pero cada vez que estamos juntos nos comportamos como novios, y cuando se va, siento como que nada me falta, no lo extraño, y si bien quiero volver a verlo y tenerlo, no me es indispensable. Aprendí a quererlo desde otro lado, como se ama a quien no se puede tener, sin obsesiones ni locuras ni llantos. Le doy libertad y lo dejo venir a mi cuando quiera, no lo llamo ni lo busco, porque es lo que en el fondo quiero yo y deduzco que es lo que quiere él, porque necesitamos tiempo para olvidar todo eso que nos hizo daño alguna vez. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario