24 jun 2013

Hoy ya no puedo con el peso de nada que no sea el aire.

Es un día un poco mierda, como ayer exactamente, o peor. El orgullo al pie del cañon, mi cañon y su cañon. ¿Y?, ¿cuál es?. Nada es. O mucho, más precisamente. Si mierda, estoy enojada. No, mentira, no estoy enojada. No se como estoy, es una sensación totalmente nueva, sepan entender. Incertidumbre neuronal pura que repercute en mis sentimientos y viceversa. Voy a ser clara: hay ciertas cosas que me rompieron soberanamente las pelotas (que no tengo, por suerte) a las cuales no estoy para nada acostumbrada porque son nuevas, aunque ninguna novedad, ya sabía que existían, pero nunca me había pasado a mi.
Sí, me molesta tener ganas de verlo y no verlo en toda la semana. Me molesta que a el no le moleste no verme. Me molesta su puto orgullo. Me molesta no saber si quiere verme. Me molesta proponer cosas y que me digan que no. Me molesta tener dudas y que hallan cosas que no cierren. Me molesta ser insegura, no quiero. Asique mejor me voy a dormir segura de que el problema no soy yo, el problema está en nuestras cabezas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario