Por ahí estuve tanto tiempo sola que me acostumbré a eso, sí, creo que eso fué. Me acostumbré tanto a la soledad que me terminé resignando. Eso de estar con diferentes personas cada tanto y no sentir nada se hizo normal, creo que llegué a pensar que eso era lo único que existía, que la vida me había deparado eso quiera o no, que ya era tarde para pensar en sentir, en amar, en entregarme a alguien por completo. Qué equivocada estaba….
No hay comentarios:
Publicar un comentario